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Londres, a comienzos del siglo XX. El escritor Herbert George Wells, padre de la ciencia ficción moderna, es invitado a participar en una sesión de hipnotismo en la que Sherlock Holmes intenta averiguar la verdad sobre un hombre amnésico que dice llamarse George Borges y que le ha pedido ayuda. Durante la ceremonia, dirigida por el eminente psiquiatra Sigmund Freud, el enfermo hace revelaciones que dejan a todos desconcertados y convencidos de su irremediable locura, pero, una vez acabada ésta, Borges es secuestrado por unas extrañas criaturas.



Viajes en el tiempo, seres extraterrestres, conspiraciones internacionales, y una amenaza venida de lo más profundo del espacio que hará tambalear la propia realidad. Además de héroes tales como Doc Savage, La Sombra, Allan Quatermain, John Carter de Marte... Y, sí, también uno que proyecta una sombra de murciélago, y otro vestido de rojo y azul capaz de volar. Y un espantoso devorador de mundos. Y, por supuesto, sadritas, muchos sadritas, aunque algo diferentes a los que conocéis, emparentados éstos con bestias surgidas del imaginario de Lovecraft.



Éste es mi humilde homenaje a un género que nunca ha sido un género en sí mismo, pero que ha marcado a todos y cada uno de ellos, y un tributo a una época, a los personajes que en ella surgieron. Y, por supuesto, a sus autores, que tanto nos han hecho disfrutar y a los que considero que la literatura debe muchísimo, porque fomentaron con sus historias un amor por la lectura que de otro modo hubiera sido difícil de conseguir. Autores que ahora, en su inmensa mayoría, son clásicos respetados, pero que en su momento arrostraron el estigma de publicar en revistas baratas, en volúmenes fabricados con papel de pulpa de escasa calidad.

Si ya los conocías, si antes disfrutabas con este tipo de aventuras sin pretensiones, con estos personajes y estos autores, espero que disfrutes con mi recreación. Si eres un experto en ellos, disculpa cualquier error que pueda haber cometido, porque yo no me considero ni de lejos un entendido en la materia, sólo un pobre enamorado de ella. Y si no los conocías, si es la primera vez que te asomas a este horizonte inmenso, entonces déjame guiarte por un universo nuevo y fascinante, que ojalá te atrape y te lleve a conocer a los originales, que son, te lo aseguro, muchísimo mejores que estas pobres adaptaciones que he utilizado.

Buen viaje al pulp.